Comienza el recuento a lo mejor del año y este 2023 la calidad no se hizo esperar.
Estos son 5 de los discos de exponentes estadounidenses que dieron enorme muestra de calidad.
Alemán – Haciéndolo Fino
Instrumentalmente el rapero mexicano ha crecido al tiempo que nos enseña su lado más íntimo y personal. Es notoria la madurez que ahora le acompaña y se sirve de ella para presentar su historia a través de las pistas que conforman este nuevo trabajo.
Lo de Alemán no sorprende, es normal que le haya bajado a la intensidad que le escuchamos en “Huracán” para hacer una apuesta más reflexiva, aunque sin bajar la calidad interpretativa.
Si bien Érick Raúl y la figura de “Alemán” son indivisibles, es el primero quien se asoma con más fuerza en un disco que pide disfrutarlo con lentitud para encontrar el “buqué” generado del proceso de envejecimiento y aprendizaje del de San Lucas.
Peso Pluma – Génesis
El amor, el éxito y el dinero no llegan solos en la región que retrata Emilio Kabande en este disco. Y aunque las buenas conciencias se empeñen en pregonar que lo que muchos exponentes del corrido tumbado están haciendo es apología de la violencia, se les olvida cuestionarse qué fue primero, si el huevo o la gallina.
Es por eso que el disco abre como un recuento del triunfo que le está permitido a una parte de la población mexicana que ha sido olvidada históricamente. Con esas trompetas cortadas y guitarras que parecen siempre rasguear lo mismo, el jalisciense no necesita de percusiones pues entre rimas y balas se establecen los golpeteos.
¿Por qué está rebasando fronteras? Porque el mexicano está llevando el género a niveles musicales pocas veces escuchado. No es el único, pero sí el que ha sabido darle un giro al género para hacerlo algo más que una moda.
Sofia Kourtesis – Madres
¡Qué gran viaje el de la peruana! No sólo por los matices y la amplia gama de sonidos que ofrece, sino porque este caleidoscopio que presenta intentando emular las emociones que surge al volver a casa es apasionante.
Es, como ella mismo dijo en algunas entrevistas, lo que pasa cuando te pierdes en mundos ajenos y te encuentras en la nostalgia. Radicada en Berlín, sabe perfecto lo que significa la añoranza en los procesos creativos. Y lo exhibe con tremenda soltura y melancolía.
El disco va más allá de los clubes de baile, del entusiasmo ante lo sombrío de los bares clásicos de Alemania y nos lleva a lugares cálidos, con texturas emotivas que nos hacen sentir ese calor tan vivo de Latinoamérica.
Son Rompe Pera – Chimborazo
Grandes golpes de marimba que son mucho más punk de lo que parece. La agrupación que fusiona la cumbia con danzón y guitarras eléctricas es un agasajo, no sólo por la alegría que imprimen a sus piezas, sino porque tienen esta actitud descarada para darle sonido a su espíritu rebelde.
Su segundo LP es de una furia tal que es prácticamente imposible no hacer headbanging mientras nos dejamos envolver por la música salvaje que proponen.
Está claro que quieren ver el mundo arder, pero con estilo, de un modo muy nuestro, que pone a la cumbia latinoamericana en otra dimensión.
Valgur – Armaggedon
Los hermanos Valdivieso Gurrión logran un sonido que rompe con las estructuras convencionales, a ratos futurista, de pronto hasta deprimente, lo cual contrasta con la voz dulce de Elizabeth.
Es por eso que de pronto sonidos láser llegan a interrumpir lo que parece una atractiva balada y se mezcla con un bossanova de bajo tempo. Todo bajo la capa de un aura ochentera y guiños a un mundo de ensueño.
Su visión muy particular del fin del mundo es colorida, atrevida, y pese a toda la pesadumbre a su alrededor por temas de violencia e inseguridad, consiguen un trabajo que logra arroparnos de un modo cálido y nos invita a la felicidad.
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