Ponle play: discos nuevos de Bombay Bicycle Club, Grimes y Galantis

Ponle play

Bombay Bicycle Club – Everything else has gone wrong

Como si fueran adivinos. Los británicos se adelantaron a los tiempos sombríos que vivimos a nivel mundial por la pandemia del Covid-19 y resaltaron en este trabajo la importancia de la música como ese espacio en donde podemos encontrar alivio ante lo que ocurre.

Si bien hay mucho de tristeza en las letras que nos presentan, la parte luminosa de la banda siempre ha estado en sus sonidos. Tras cinco años de ausencia parece que han inclinado la balanza hacia el jazz, cuya presencia se nota mucho más fuerte ahora que en discos anteriores.

Lo que tenemos aquí es un álbum desigual, que quema toda su energía en su primera mitad y se repite para la segunda, dejándonos la sensación de que esa reunificación inició con mucho brío y de algún modo había que completar un larga duración.

Grimes – Miss Anthropocene

La canadiense “ha pulido la locura”. Ya no estamos ante esa mujer que soltaba ideas por todos lados como en pleno “viaje” tras un coctel de alucinógenos. Tenemos aún esos escenarios futuristas llenos de desolación pero ahora con una producción a la altura de cualquier pop de estantería. La combinación es gratificante, pero extrañamos ese sonido de proceso rudimentario.

Al parecer lo de hoy es que los artistas auguren la llegada del apocalipsis sin caer en cuenta que podríamos estar ya en él. El “fin del mundo” de este trabajo viene cargado de máquinas y tecnología, todo lo que no existe ahora de un modo catastrófico. Sin embargo, esta visión tipo ciencia ficción contrasta con los sonidos que Grimes utiliza para contárnoslo. Igual es ahí donde la falta de conexión nos pierde.

Este nuevo disco rebosa en imágenes. El contraste al que nos expone Grimes es lo que podría hacernos creer que la locura no le dio para más o, todo lo contrario, su idea de un final lleno de ciencia “maligna” con sonidos “lindos” es lo que vale la pena.

Galantis – Church

Tiene enorme colorido, pero la misma mezcla aplica para todos los temas, lo que resulta en un disco en el que no se sienten los cambios entre canciones.

Lo innegable es esa energía que presumen en cada entrega, la misma que los posiciona como una banda que es mucho mejor ver en vivo que escucharla en casa. Es por eso que esté llamado para acudir a la “iglesia” es como si el disco fueran las campanadas que nos piden verlos en directo para apreciar el compilado de hits que trae esta placa.