Ponle play: discos nuevos de Calvin Harris, Hal Incandenza y Kodak Black

Kodak Black

El hecho de manifestar de inicio que no canta sino que dibuja historias evidencia que peca de pretencioso y, todavía peor, no cumple lo que promete.

Porque si somos honestos, lo de Dieuson Octave parece más un dibujo a crayones de un niño que una pintura. No quiere decir que sea un desperdicio, pero tampoco es un disco que enganche por completo. Se trata de algunos temas y unas cuantas líneas que muestran un auténticos talento para contar lo que vive el oriundo de Florida.

Calvin Harris

El experimento retro del DJ más popero que existe representa un éxito: sin duda es el disco que conjunta celebridades con el mejor ritmo de la temporada.

El desmarque del clásico estilo de hacer cosas es notorio más allá del viaje a los 80, con mucho boogie y old funk: es una de esas placas para veranear, con mucha arena y playa alrededor.

No cabe duda que Harris es un maestro para la producción. De música electrónica ya ni hablamos, porque el tipo entendió que para hacer dinero no se trata del respeto al beat, se trata de ritmos y ya con la fórmula del éxito en mano, él prefiere mejor ponerse a “pinchar”.

Hal Incadenza

Otro que pensó en el verano, pero definitivamente no en cuánto dinero iba a acumular es Henry Saiz, que bajo su alias de Hal Incadenza presenta temas relajados y llenos de texturas. Pensando en otro tipo de fiesta, una más personal.

El productor español intenta combinar esos ritmos del trópico a los que se ha habituado por su estancia en Bahamas, pero no arma un relajo épico, más bien es una onde introspectiva, como cuando quieres pasarte la tarde sin excesos pero con tiempo de calidad.

Saiz no presenta “Calor”, la placa es más una brisa refrescante.

Juárez Góngora

Es orgullosamente yucateco. Egresado de la licenciatura en Periodismo en un colegio de la tierra del panucho y el salbut. Le dio por conocer varias zonas del país hasta que se avecindó en la Ciudad de México, donde se dedica a hacer textos para el mundo del internet. Amante de la literatura, melómano, pero primordialmente cinéfilo, de niño repasó películas en formato Betacam una y otra vez, hasta que finalmente, un buen día, fue al cine y de ahí no pudo salir.