Ponle play: discos nuevos de Porter, The 1975 y Muse

Ponle play

Porter

Alejados de las letras oníricas y sonidos a lo dream pop, la banda renace escarbando en la historia y dándole ritmo al pasado mexicano.

Con “Moctezuma” iniciaron este recorrido por sonidos con tintes prehispánicos y un intento de explicación de ese pretérito no didacta y más sensorial. El camino sigue la misma senda pero con la idea de ofrecer una vuelta atrás más melódica y son letras más directas.

The 1975

No importa el estilo, saben sacarle todo el jugo posible a lo que sea que presenten, validando su estatus de los creadores más significativos de la generación millenial. Igual pueden usar jazz para arremeter contra la tecnología y las redes sociales que dejar que Siri narre cómo un hombre se enamoró perdidamente de internet.

La vida moderna es el motor de este trabajo, probablemente el más significativo del año pese a que llega en el último mes de 2018, lo que significa que los de Reino Unido ofrecerán un 2019 lleno de emociones, presentaciones y probablemente un espectáculo adecuado para la propuesta experimental que entregan.

No se trata de un álbum divertido, pero no se siente su duración de una hora pues saben transitar entre el brit pop más puro al blues más comercial. Es su trabajo más consistente hasta el momento.

Muse

Parece que se cansaron de ser una parodia de ellos mismos y se avientan casi casi por la vereda del teatro musical, tomando un concepto para desarrollar, una vez más. Y en ese cambio de ruta puede ser que decepcionen a muchos fanáticos que esperaban más de lo mismo, pero, quizá, no sea más que una “simulación”, como bien de menciona en el título que da nombre al disco.

Hasta ritmos propios del hip hop aparecen en este intento de reinvención que se escucha desangelado pese a toda la energía ofrecida, en un ánimo más por desarrollar ese rock arena que le va bien para la pirotecnia y luces a raudales que no tienen mucho que contar pero brillan con intensidad, pese a todo.

Juárez Góngora

Es orgullosamente yucateco. Egresado de la licenciatura en Periodismo en un colegio de la tierra del panucho y el salbut. Le dio por conocer varias zonas del país hasta que se avecindó en la Ciudad de México, donde se dedica a hacer textos para el mundo del internet. Amante de la literatura, melómano, pero primordialmente cinéfilo, de niño repasó películas en formato Betacam una y otra vez, hasta que finalmente, un buen día, fue al cine y de ahí no pudo salir.