The Lords of Salem y las brujitas del cakle cakle

Las brujas de Salem son la sal de la literatura gótica, musas de poetas eróticos y culpables, con la ayuda del dramaturgo Arthur Miller, que asociemos el bello nombre “Abigail” con el apellido “de Satanás y Belcebú Chamuco”.

Rob Zombie no podría dejarnos sin su particular visión sobre uno de los episodios más vergonzosos en la historia de la humanidad por lo que decidió filmar una película llamada “The Lords of Salem”. Bien.

La vi en el año de su estreno (2013) y gracias a las “Recomendaciones para María del Mar” de Netflix la volví a ver y recordé por qué la olvidé. El diseño de arte de las películas, discos, videos y parafernalia de Rob Zombie es un espectáculo para mis ojos. Soy fan. Ahora, cuando se trata de guionismo… Esté…

“The Lords of Salem“, lamentablemente, podría ser otro ejemplo de lo que ocurre cuando tienes una buena idea, la vendes, consigues dinero para financiarla, te la crees y luego ya no sabes qué hacer con ella, entregándole al público un calcetín zurcido con hilos de diferentes colores y que sólo tu familia aplaude.

La historia dice así: Heidi es una locutora de radio con un pasado junkie pero de personalidad “cool”. Trabaja en la noche así que su vida no va al ritmo de los demás además de que está tratando de superar su adicción a ciertas sustancias.

Un día de aquellos recibe el disco de una banda llamada Lords of Salem el cual decide compartir con sus seguidores aunque no sabe quién se lo mandó ni por qué. Nada puede salir bien de eso, ¿verdad? Los radioescuchas entran en trance con la rolita y de ahí se desencadenan una serie de momentos relacionados con brujas vengativas, inquisidores, black metal, suicidios y el nacimiento del “ser de otro mundo”.

Todo lo anterior presentado tan doom, tan impactante a la vista que no puedes retirar la mirada de la pantalla y ahí quedó, porque la historia es confusa y no bien llevada. Alguien le tiene que decir a Rob Zombie que está bien creer en tu pareja y apoyarla en conseguir sus sueños pero es hora de enfrentar la realidad: Sheri Moon Zombie es muy mala actriz.

Y si tu protagonista tiene limitadas dotes histriónicas, tu película se puede ir al caño aunque tenga otros elementos salvables. La señora de Zombie ha participado en todas las películas de su don y las más destacadas son las que su papel es secundario, de chica sin muchos tornillos.

A la buena Sheri le quedó muy grande el protagónico de “The Lords of Salem“, no supo transmitir las tribulaciones que supuestamente atraviesa una persona que enfrenta a sus demonios, reales y mentales, y causa risa. Aunque tal vez la intención del director es hacer una película clase B, donde no importe mucho el talento….

Como fan del concepto Rob Zombie recomiendo este filme. Como fan le pido que tome consciencia de la importancia de la continuidad en un guión y relegue a su esposa a personajes secundarios. “The Lords of Salem” pudo ser inolvidable.

*Imágenes tomadas de la página de Facebook oficial de “The Lords of Salem”.

María del Mar Boeta

Quiere un muñeco tamaño real de Chucky el Muñeco Diabólico. Piensa pagarlo con sueldos de reportera, historiadora y Copy Writer. Escribe bien bonito para el proyecto rock-musical-psicodélico Malosa Mami.